Descripción del proyecto
ANTIGUA COMISARÍA DE LA GAVIDIA.
PLAZA DE LA CONCORDIA 2.
SEVILLA. SEVILLA.
GERENCIA DE URBANISMO DE SEVILLA
PEM. 8 500 000 €
Si enumeramos las singularidades arquitectónicas que hicieron a este edificio tan importante como para ser incluido en la lista de DOCOMOMO Ibérico y en el Catálogo de Patrimonio Histórico Andaluz, tenemos en un lugar principal la imagen abstracta que proyecta la sucesión de rotundos paños ciegos y acristalados que abren los espacios interiores al espacio exterior, desdibujando la delimitación interior-exterior, para hacer partícipe de la vida urbana a la persona que se encuentra en el interior del edificio.
Por otro lado, la configuración en torno a tres volúmenes diferenciados, dos de ellos en torno a sendos patios centrales, hace que aparezcan espacios con diferente carácter, quedando el más urbano en el ala sur, la de mayor recogimiento y silencio en el ala norte las zonas que se abren a el paisaje urbano de torres, campanarios y azoteas en el volumen central y en cada una de las cubiertas, hasta ahora no utilizadas, pero que como veremos más adelante, se incorporarán como espacios fundamentales en el proyecto de intervención.
Esta importancia de la imagen y de las características de los espacios no se hubieran podido conseguir sin una serie de sistemas constructivos novedosos en la Sevilla de principios de los sesenta del pasado Siglo como los muros cortinas y las grandes carpinterías de acero y vidrio que aportan la transparencia o los esbeltos perfiles metálicos que le incorporan el aspecto liviano a cada una de las estancias.
Por ello y tras un profundo análisis de la situación, las características arquitectónicas y técnicas, quizás lo más lógico sería implantar uno o varios usos que devuelvan por un lado ese carácter de elemento urbano del espacio interior, al que pueda acceder cualquier persona y una zona de más larga estancia, donde poder disfrutar de esos espacios de reposo abiertos o no al entorno urbano. De esta forma, hemos constatado cómo el planteamiento pasa por la implantación de varios usos que puedan abrirlo en parte a la Ciudad y a la propia ciudadanía, como espacio de trabajo o expositivo, así como un área ligada al ocio y al descanso.